Probablemente has escuchado que se puede evitar la aparición
de canas si uno mantiene bajos los niveles de estrés. Pero esto es falso, las
canas tienen poco que ver con el estrés.
En realidad, los factores genéticos parecen desempeñar un
papel más importante en la determinación de cuándo el cabello comienza a perder
su color.
El color de pelo es producido por células conocidas como
melanocitos, que migran a los folículos pilosos mientras la persona se
desarrolla en el útero. Los melanocitos producen pigmentos que se incorporan a
las fibras del cabello en crecimiento para producir pelo en una casi infinita
variedad de tonos naturales.
La producción de pigmento también se enciende y apaga al
ritmo del ciclo del pelo. Las células de pigmento se apagan al final de un
ciclo de cabello y no se vuelven a encender sino hasta el inicio del ciclo
siguiente.
Al final de cada ciclo del pelo, algunos melanocitos
productores de pigmento se dañan y mueren. Si el depósito de células madre de
melanocitos en la parte superior del folículo se reactiva, se mantiene la
producción de pigmento. Pero cuando se agota la reserva de células madre, la
producción de pigmento se detiene y el pelo se vuelve gris.
"Para la gran mayoría de la gente, el pelo gris no tiene
nada que ver con hábitos, sino con factores genéticos fuera de su
control", dijo Nina Goad de la Asociación Británica de Dermatólogos a la
BBC.
Varios estudios
en roedores han sugerido un vínculo entre el estrés y la aparición de canas,
incluso, un estudio
en 2011 sugirió que la exposición a largo plazo al estrés, que se ha demostrado
que afecta nuestro ADN, podría modificar los genes que dan a nuestro cabello su
tonalidad.
Además, un estudio
de 2009 sugirió que la razón por la cual el pelo pierde su color es porque a
medida que envejecemos, producimos cada vez menos una proteína protectora
especial que amortigua el cabello contra un proceso natural de blanqueamiento
desde el interior.
Pero hay poca investigación para apoyar la idea de que los
resultados de esos estudios se repiten también en humanos. "No hay
evidencia que vincule la aparición del envejecimiento con el estrés, la dieta o
el estilo de vida", Rodney Sinclair, profesor de dermatología de la
Universidad de Melbourne.
FUENTE: ScienceAlert
Si quieres estar siempre enterado de lo último y lo mejor en descubrimientos, investigaciones y avances científicos y tecnológicos SUSCRÍBETE AQUÍ en un solo paso. Recibirás un boletín semanal con lo mejor de Sophimanía.