La compañía aeroespacial Blue
Origin, propiedad del empresario estadounidense Jeff Bezos ha vuelto a lanzar
su cohete New Shepard, demostrando así que la reutilización de un cohete
espacial es posible.
El vuelo tuvo lugar el viernes
22 de enero desde una de las instalaciones de prueba en Texas y de acuerdo a
Bezos, también fundador de Amazon, el hardware es exactamente el mismo que utilizó
en noviembre pasado, "lo que demuestra la reutilización" dijo en su blog. Como viene siendo
su práctica, la compañía no hizo público el evento hasta después de haber
ocurrido.
El
vuelo de noviembre fue la primera vez que un cohete despegó y logro aterrizar
suavemente tanto la carga útil como los propulsores, la parte más cara de un
cohete. Esta hazaña motivó, en parte, que otro millonario, Elon Musk, intentara
lo mismo en diciembre aterrizando
con éxito su cohete Falcon 9 mejorado.
Aunque es inevitable comparar
ambas compañías, la verdad es que SpaceX está en otro nivel. Mientras que la compañía
de Musk está llevando cargas útiles como satélites a alturas orbitales, los
cohetes de Blue Origin solo están llegando a la Línea Karman.
"Esta vez, el New Shepard alcanzó un apogeo de 333,582ft (101,7
kilometros) antes de que ambos cápsula y propulsores regresen suavemente a la
Tierra para ser recuperados y reutilizados." Dijo el video de la compañía.
Cien kilómetros es considerado
como el límite oficial del espacio. El New Shepard aún no alcanza las
velocidades que permiten que el sistema entre en órbita y se mantenga ahí, pero
Bezos dice que su compañía está trabajando en una familia de cohetes de
diversos tamaños que harían esto posible. Más información será revelada a
finales de este año.
Tal y como lo está haciendo
Musk con SpaceX, Bezos también está planeando enviar vuelos tripulados, ya sea
con hardware como con tripulantes. Sin duda se vienen tiempos interesantes en
la industria aeroespacial.
Lanzar. Aterrizar.
Repetir. Video: Blue Origin
FUENTE: BBC