La empresa chilena de energía Valhalla,
ha recibido recientemente la aprobación del gobierno para su proyecto de 400
millones de dólares, “Espejo
de Tarapacá”, una planta en Atacama que alternando energía solar e hídrica permitirá
suministrar energía limpia y continua al norte del país.
Los cerca de 300 megavatios
que el proyecto puede generar, es suficiente para alimentar a tres provincias
en Chile y será utilizado principalmente para clientes comerciales e
industriales. Debido a que el país importa más energía de la que genera y se esta
se basa principalmente en combustibles fósiles, el proyecto no puede llegar en
mejor momento.
Aunque suena extraño que se
quiera construir una hidroeléctrica en el lugar más seco del planeta, Valhala basa su proyecto en las excepcionales
características geográficas del desierto Atacama, las cuales, afirman, harán productivo
el proyecto.
El proyecto recogerá agua del
Océano Pacífico durante el día y lo almacenará en dos reservorios naturales en
la cima de la montaña, a 600 metros sobre el nivel del mar. Por la noche,
cuando no hay energía solar, el agua almacenada fluirá hacia abajo en la planta
hidroeléctrica.
"Encontramos estas
depresiones naturales las cuales, creemos, eran lagos muy antiguos, pero es
evidente que no hay nada en la actualidad, es un desierto, que nos permitirá
almacenar ahí el agua", dijo
el co-fundador de la compañía y director ejecutivo, Juan Andrés Camus a
Reuters. Debido a estos reservorios naturales, la empresa ya no necesita construir
presas, disminuyendo así el costo de la construcción y ahorrándoles el proceso
de conseguir una licencia del gobierno para la construcción de estas.
Sin embargo, para hacer que el
proyecto Espejos de Tarapacá sea económicamente viable se necesita una
construcción complementaria de 500 millones de dólares. Esta construcción se
llamará Cielos de Tarapacá
y usará
energía solar para bombear el agua de mar montaña arriba hacía los embalses
en la cima de la montaña. Sin él, Espejos de Tarapacá no funcionará ya que la
energía necesaria para subir el agua es mayor a la que se generará cuando esta
fluya hacía abajo.
Este proyecto alterno, que aún
no cuenta con la aprobación del gobierno, está buscando inversores y fondos
para su construcción. Se espera que la construcción comience en el segundo
semestre de 2016 y esté operativo en 2020.
"Estamos convencidos de
que la Región de Tarapacá puede ser líder en energía solar, y Chile puede
convertirse en una superpotencia energética en el mundo, en base a energía
barata, limpia e infinitamente abundante, por lo que es una gran noticia saber
que nos movemos a la siguiente etapa para realizar este proyecto, que va a
cambiar la cara de la matriz energética de nuestro país ", dijo
Francisco Torrealba, cofundador de Valhalla.
La compañía también consideró a
las comunidades de los alrededores de la región, analizando sus preocupaciones
y pensando en maneras de contribuir al crecimiento y desarrollo de estas.
FUENTE: LATINCORRESPONDENT