Los peces jóvenes se convierten en adictos a comer plástico de
la misma manera que los adolescentes prefieren la comida rápida y poco
saludable, según un estudio publicado en Science.
Esta investigación de la Universidad de Uppsala, encontró que la exposición a
altas concentraciones de poliestireno hace que las larvas lo prefieran sobre alimentos
más naturales.
Como resultado de la exposición a plástico, los jóvenes perca
son más pequeños, más lentos y más susceptibles a los depredadores. Es por esto
que los investigadores hicieron un llamado para que las micro perlas de
plástico sean prohibidas en los cosméticos. Un estudio que salió el 2015
encontró que 8 millones de toneladas de residuos plásticos entran en los
océanos anualmente.
Cuando se expone a la radiación UV, la degradación química y
el movimiento de las olas, este plástico se rompe en pequeños pedazos. Los pedazos
menores de 5 mm se conocen como micro-plásticos. El término también abarca el plástico
en micro perlas de productos de cuidado personal, como los exfoliantes y
cremas. Los científicos han estado preocupados de que estos pequeños fragmentos
puedan acumularse en los intestinos de los animales marinos.
Para analizar el impacto de las micro-plásticos en las
etapas tempranas de la vida de los peces, los investigadores suecos expusieron
larvas de perca a diferentes concentraciones de poliestireno en los tanques de
agua. En ausencia de micro-plásticos, alrededor del 96% de los huevos
eclosionaron con éxito. Esto se redujo a 81% en los expuestos a grandes
cantidades. Los peces que eclosionaron en estas aguas con altas cantidades de
micro-plásticos eran "más pequeños y más lentos" que aquellos que
eclosionaron en aguas limpias, explico el autor principal Dr. Oona Lonnstedt.
Cuando se expone a los depredadores, aproximadamente la mitad de los jóvenes perca sanos sobrevivió durante 24 horas. Aquellos que se habían desarrollado con concentraciones más fuertes de plástico fueron depredados completamente en el mismo período. Lo más sorprendente para el equipo de investigación fue la forma en que el plástico cambia sus gustos alimentarios.
"Todos
ellos tenían acceso a zooplancton y, sin embargo, decidieron simplemente comer
plástico. Parece que es un producto químico o físico que el plástico tiene, que
desencadena una respuesta de alimentación en peces", explica el Dr.
Lonnstedt."Básicamente se dejan engañar pensando que es un recurso de alta
energía que necesitan comer mucho".
FUENTE: BBC