Los arqueólogos han descubierto lo que creen que podría ser
un hueso del cráneo de Buda dentro de un cofre de 1.000 años de antigüedad en
el santuario budista situado en una cripta subterránea en Nanjing, China. Dentro
de la cripta, que se encuentra debajo de las ruinas de un antiguo templo
budista, los investigadores encontraron el cofre de 1,2 metros de altura hecho
de madera de sándalo, plata y oro, y decorado con cristal, vidrio, ágata, y
lapis lazuli. Dentro había una pequeña urna de oro que contenía un fragmento de
hueso del cráneo.
El cofre está adornado con imágenes de los patrones de loto,
aves fénix, y dioses con espadas. El cofre de oro fue encontrado dentro de un
cofre de plata más grande. Los dos ataúdes fueron colocados en el interior del
santuario modelo, o estupa, que es una estructura semiesférica que contiene
reliquias o restos de monjes o monjas budistas, que se utiliza como lugar de
meditación. El hallazgo se publica en Chinese
Cultural Relics.
Los investigadores afirman que las inscripciones grabadas en
el cofre de piedra indican que el hueso pertenecía a Sidarta Gautama, fundador
del budismo (o sea, Buda). Las inscripciones fueron hechas hace mil años atrás
por alguien que se identifica como Deming. El fragmento de hueso parietal (lado
y parte superior del cráneo) fue encontrado al lado de unos santos budistas
contenidos en cajas de cristal y plata. Acompañados tenían inscripciones que
describen cuándo fue construido y le atribuyen el hueso a Buda.
Crédito: Wayne Woo
Según las inscripciones, las diversas partes se construyeron
durante el reinado del emperador Zhenzong, alrededor de 997 a 1022 dC, y fueron
alojados inicialmente en el gran templo Bao'en, hasta que fue destruido durante
una serie de guerras. Posteriormente fueron trasladados a la cripta subterránea
el 21 de julio 1011 dC. Las inscripciones también indican que esto se le dio al
emperador para desearle una vida larga, ministros fieles y numerosos nietos,
explica Owen Jarus para Live Science.
En las inscripciones de Deming también se cuenta cómo el
emperador accedió a reconstruir el templo y cuidar el hueso parietal del Buda,
y los restos de otros santos, enterrados en una cripta subterránea, que es donde
ahora han sido encontrados. En esta etapa, todavía las pruebas son circunstanciales,
por lo que los expertos no están dispuestos a decir con seguridad que es el
hueso del cráneo de Siddhartha Gautama.
El hueso fue recuperado por el Instituto Municipal de
Arqueología de Nankín después de excavaciones realizadas entre 2007 y 2010 y
fue puesto en exhibición en Hong Kong en 2012, antes de ser alojados en forma
permanente en Qixia Temple.
FUENTES: RT,
Science
Alert