Desde el 2015, las Naciones Unidas celebran el Día
Internacional de la mujer y la niña en la ciencia, para fomentar la
participación equitativa de mujeres y niñas en los campos de la ciencia y la
tecnología.
En el Perú de los 37,079 inscritos en el Directorio Nacional
de Investigadores e Innovadores (DINA), solo 12,554 son mujeres. Es decir, 1 de
cada 4 investigadores es mujer. La brecha entre la participación de hombres y
mujeres en este campo todavía es bastante grande.
El Concytec y la Universidad Peruana Cayetano Heredia (UPCH)
han unido esfuerzos para incrementar la participación de mujeres en ciencia,
tecnología e innovación. Esta Universidad promueve a las mujeres a estudiar carreras de
ciencias, es dicha facultad el 67% de
sus estudiantes son mujeres y el 71% de todos los estudiantes de la universidad
son mujeres. Esto es inusual en otras universidades científicas.
Otra de las formas de fomentar la participación femenina es
el establecimiento de premios y reconocimientos a las docentes, egresadas e
investigadoras de Cayetano. El año pasado, la Dra. Magaly Blas, una
investigadora de la universidad y profesora en la Facultad de Salud Pública y
Administración, recibió 3 reconocimientos: el premio L’Oreal-UNESCO-Concytec
para mujeres científicas peruanas, el premio internacional de la Fundación
Elsevier para mujeres investigadoras en edades tempranas de su carrera, premio
que le fue otorgado como representante de Latinoamérica, y el premio de Buenas
Prácticas en Gestión Pública otorgado por su proyecto “Mamás del Río” por
Ciudadanos al Día. Este último ha recibido una subvención de S/.1’400,000 del
Cienciactiva de Concytec para su ampliación.
Su estudio se orienta a la prevención en temas de salud e
iniciativas para elevar los niveles de acceso a los sistemas de salud de
mujeres embarazadas de escasos recursos, usando la tecnología en plataformas
digitales. Este proyecto fue adoptado por el gobierno peruano y, en enero de
este año, aprobó la Directiva Administrativa que establece el uso de la
“Plataforma Web WAWARED” en los establecimientos de salud.
Aún hay mucho por hacer y más universidades científicas deben sumarse a los esfuerzos del Estado e iniciativas privadas para formar más científicas mujeres y fomentar el acceso a la información científica a las niñas que hoy están soñando con su futuro.