Una pequeña gran victoria han
tenido los
vehículos autónomos (ya la industria de la Inteligencia Artificial) la
semana pasada, en su camino a ser aceptados totalmente en las pistas de EE.UU y
eventualmente el mundo.
La Administración Nacional de
Seguridad Vial de los Estados Unidos (NHTSA por sus siglas en inglés) ha
enviado una carta a Google en el que consideran a la inteligencia
artificial como un “conductor” ante la ley, y por consiguiente está en
capacidad de satisfacer una serie de normas de seguridad. El hecho que el
conductor sea una IA no sería un obstáculo para que los vehículos autónomos operen
legalmente dentro de las carreteras del país norteamericano.
"Estamos de acuerdo con Google
en que sus VAM’s (vehículos automanejables) no tendrá un "conductor" en
el sentido tradicional que los vehículos han tenido conductores durante los
últimos más de cien años", escribe
el abogado jefe de la NHTSA, Paul A. Hemmersbaugh. "Si el ocupante
humano no puede en verdad manejar el vehículo, es más razonable identificar al “conductor”
como lo que sea (en oposición a quién sea) que esté manejando. En este caso, un
elemento del equipo de vehículos, el (SDS – Sistema de Autoconducción) está en
realidad conduciendo el vehículo".
Aunque que la carta ofrece solo
un reconocimiento de que los sistemas de IA podrían tomar legalmente el volante
debido a que nadie
más en el auto puede hacer ese trabajo, aun así está siendo considerada
como un gran impulso para el transporte autónomo.
"El intrincado laberinto
de cuestiones legales sobre los vehículos autónomos es un obstáculo a su
llegada tan grande como los desafíos tecnológicos que aún quedan," dijo
el analista de la industria del automóvil Karl Brauer. "Sin embargo,
si la NHTSA está preparada para nombrar la inteligencia artificial como una alternativa
viable a los vehículos controlados por humanos, entonces se podría simplificar
considerablemente el proceso de poner a los vehículos autónomos en la carretera."
Añade.
Los defensores de los
vehículos autónomos señalan que, estadísticamente, estos son mucho menos mortales
que los conductores humanos, pero las preocupaciones con respecto a la
seguridad significan que su implementación total todavía está a varios años de
distancia. Aparte de la eficiencia de sus sistemas de IA, también está la
cuestión de la seguridad, con los vehículos conectados a Internet hoy en día el
riesgo de que puedan ser hackeados es significativo.
La ambivalencia de los
consumidores es otro factor a considerar, los
sondeos muestran que los conductores humanos no están muy animados a
entregarle el control a las máquinas. También existe la pregunta incómoda de
cómo se sienten las personas al saber que algunos casos la IA podría verse
obligada a matar al conductor con el fin de salvar a otros. ¿Tú te subirías a
uno?
FUENTES: SCIENCEALERT,
THEVERGE