El Premio Abel es un galardón que
se entrega cada año al matemático más destacado. Este premio instituido en
honor a Niels Henrik
Abel se entregó por primera vez en 2003 y en esta ocasión ha sido obtenido
por el matemático británico Andrew J. Miles por demostrar el Teorema de Fermat.
Este teorema fue formulado por
el francés Pierre de Fermat en 1637 y durante más de tres siglos se consideró
un problema sin solución que obsesionó desde grandes matemáticos hasta
personajes ficticios como Homero Simpson o Lisbeth Salander. Hasta 1994,
año en que Andrew J. Wiles demostró su solución.
El último teorema de Fermat es
bastante simple de poner en una
ecuación: a la n + b elevado a la n = c elevado
a la n, no hay solución en números enteros si n es mayor que 2. Pierre Fermat
dejó escrita esa ecuación en el margen de un ejemplar de los Elementos de
Euclides y añadió que “tenía una demostración maravillosa pero no espacio
suficiente para escribirla”.
Sin embargo, los expertos consideran
que la solución planteada por WIles no puede ser la que planteó Fermat porque
para poder hacerlo, Fermat debería haber utilizado desarrollos matemáticos muy
posteriores. Esto supone que Fermat en realidad nunca encontró la respuesta y todo
fue una broma.
Para poder haber resuelto el
teorema, Fermat debería haber conocido la conjetura
de Taniyama (que dice que toda ecuación elíptica tiene que ser modular) que
fue planteada muchos años después de la muerte de el mismo en el Siglo XX. Wiles,
solucionó primero el teorema de Taniyama para poder resolver el de Fermat.
La demostración del teorema de
Fermat fue el punto cumbre de la carrera de Andrew J. Wiles Wiles, que se formó
en las universidades de Oxford y Cambridge y amplió luego estudios en Estados
Unidos y en Francia. Tras varias estancias en el extranjero, Wiles volvió a
Oxford en 2011 en calidad de profesor investigador de la Royal Society.
El Premio Abel, que otorga más
de 600 mil solares (6 millones de coronas noruegas), le será entregado el 24 de
mayo en una ceremonia en Oslo. Se le considera el “Nobel de las Matemáticas”,
ya que el
premio Nobel real, no premia a matemáticos.
FUENTE: EL PAÍS