Algunas personas con dependencia del alcohol intentan
controlar su consumo, con la ayuda de un programa de tratamiento, en lugar de
renunciar al alcohol por completo, pero un reciente estudio
de la Universidad de Gothenburg considera que la abstinencia total es mucho
más eficaz.
En el estudio, las personas con trastornos por uso de
alcohol que se abstuvieron totalmente de la ingesta de alcohol, tuvieron casi
dos veces más probabilidades de tener éxito 2,5 años después de comenzar el
tratamiento, en comparación con los que estaban en programas de tratamiento que
buscaban controlar el consumo de alcohol, ya que nunca detienen por completo su
consumo.
Se estima que 15,7 millones de estadounidenses mayores de 12
años tuvieron un trastorno por consumo de alcohol en 2015, según un informe
federal. Se considera trastorno por consumo de alcohol si tienen dificultades
para controlar la ingesta de la bebida, siguen bebiendo incluso cuando causa
problemas, desarrollan tolerancia al alcohol o tienen síndrome de abstinencia
cuando dejan de consumirlo, de acuerdo con la Clínica Mayo
En el estudio los investigadores dieron seguimiento a 201
pacientes que entraron en un programa de tratamiento de alcohol que, o bien se
centró en la abstinencia, o se centró en la bebida de "bajo riesgo". Al
final del período de seguimiento de 2,5 años, el 90 % de las personas en los
programas orientados a la abstinencia habían tenido éxito en dejar la bebida.
Por el contrario, en los que pasaron por un tratamiento de control del consumo,
solo el 50 % logró dejar el alcohol.
En otras palabras, "los pacientes cuyo objetivo era de
abstinencia total fueron más exitosos que aquellos que habían optado por
controlar la bebida," explica Kristina Berglund, profesora de psicología de
la Universidad de Gothenbur y autora principal del estudio. Cuando la gente
hace de la abstinencia su objetivo, la meta es clara, dijo Berglund.
FUENTE: Live
Science